Reseña: Nunca digas nunca (Mery Eirabella)

Nunca digas nunca (Secret life I) 

Colin llega a Madrid huyendo de una situación dolorosa. Le han ofrecido un buen empleo y una antigua novia le ha conseguido un alojamiento muy económico. Pero, como todo lo bueno, tiene un inconveniente: Jared, el propietario del piso, es americano y Colin detesta a los americanos. Aunque este yanqui en cuestión tiene más cosas en contra aparte de su nacionalidad: es esnob, engreído, demasiado pulcro y, además, lo observa cuando está desnudo. Todas estas son, en opinión de Colin, razones más que suficientes para odiarlo y así lo haría si no fuese porque su cuerpo y su corazón tienen planes muy diferentes a los que su mente ha trazado.

Mi opinión:

Hacía mucho, mucho tiempo que no leía una novela de estas características, de hecho, creo que la última vez que tuve contacto con algo así fue viendo el anime Junjou romántica (serie, por cierto, que me encanta). Quizá por eso me gustó tanto la sinopsis y lo que iba a encontrar entre sus páginas.

Efectivamente, la novela habla de la relación amorosa de dos hombres: Colin y Jared. 

Realmente, poco se puede desvelar de la sinopsis, ya que es una novela corta, muy corta, que engloba una relación algo precipitada.

Pero bueno, empecemos por el principio:

Colin es un irlandés que acaba de salir de un momento muy traumático de su vida: un secuestro, un secreto muy oscuro y una serie de acontecimientos que es mejor olvidar. Por eso, decide abandonar todo lo que conoce y se muda a España, más concretamente a Madrid. Allí, gracias a una ex novia consigue compartir piso con otro ex de ella, un estadounidense víctima de la moda, snob y con las ideas muy poco claras.

El choque entre ambos es brutal, ya desde el principio, ya que pertenecen a mundos completamente diferentes. Pero, incluso así, conectan como lo harían dos personas que se acaban de conocer. 

Pero, ¿qué ocurre cuando los pensamientos se descontrolan?

La primera impresión que tiene Colin sobre Jared, no es buena, está claro... pero tampoco termina de desagradarle. Lo mismo ocurre con Jared, que se ve observándole de reojo cuando cree que él no se da cuenta. 

Pero, claro... las cosas no son sencillas: Jared tiene novia, un padre absolutamente homófobo y un montón de problemas en la cabeza sobre lo que es correcto y lo que no. 

¿Y Colin? 

Aparte de sus traumas más recientes, no tardará en darse cuenta de que la vida de libertino no es para él... y mucho menos tras conocer más a fondo a Jared. 

Hasta aquí, el resumen de la sinopsis. Como veis, es una historia sencilla, corta, pero que se desarrolla con mucha habilidad y soltura. Si bien es cierto que a veces resulta todo un poco precipitado, hay escenas que merecen mucho la pena, ya que puedes saborearlas con una sonrisa en los labios. Aun así, hay cosas, como siempre, que dejan un regusto ligeramente amargo: el hecho, por ejemplo, de que todos los personajes sean gays (lo que es un cliché en este tipo de novelas), o la rapidez con la que se sucede la historia de amor. 

Creo que, para mi, ese es uno de los problemas principales, aunque realmente, no llegan a serlo. A fin de cuentas he disfrutado mucho con la historia: me he reído, he querido matar a Jared en más de una ocasión y me he enfadado lo suficiente con Colin como para cogerle cariño.

La primera parte de la historia nos habla, en realidad, de los inicios de esta pareja. Pero, un poco más adelante, tras unos cuantos tiras y aflojas (que merecen la pena, especialmente cuando empiezan a "intimar") conoceremos la otra parte de la relación: la vida en pareja, el miedo por parte de Jared al qué dirán, los problemas con su ex-novia... el hecho de conocer a la familia de Colin (cosa que, por cierto, me gustó mucho).

En cuanto a la narrativa, no hay mucho que decir: su estilo es sencillo, cuidado en algunas de las descripciones y algo escaso en otras. Transmite muy bien la rabia de algunos personajes, pero otros se quedan un poco al margen, aunque, al ser secundarios, no molesta tanto. 

Como punto positivo, diré que la caracterización de ambos personajes me gustó mucho, así como las escenas de sexo, que son buenas, aunque me hubiera gustado incluso más si hubieran sido un poco más subidas de tono. 

Romperé otra lanza a favor de la novela gracias al punto de misterio que añade su autora respecto al secreto de Colin, ya que es un hilo conductor que nos hará preguntarnos muchas cosas. Su resolución es francamente genial, y hace que empatices incluso más con Colin.

En definitiva, es una novela entretenida, muy recomendable si queréis leer una historia de amor completa, con pasión, enredos y algún toque de drama. 

Escena favorita:

Guardo muy buenos recuerdo de esta novela, pero creo que una de las escenas que más me gustaron, fue el momento en el que Jared le tira a Colin un jarrón a la cabeza. Llamadme rara, pero me hizo gracia :D

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