Reseña: Recuérdame (María Martínez Ovejero)

Recuérdame

Un misterio yace tras los muros de hiedra y piedra de la vieja casa del acantilado. El tiempo, la muerte y el olvido silenciaron su historia. Cincuenta años después todo vuelve a cobrar vida.
Un verano para alejarse de todo, un verano para conocerse, para enamorarse. Un verano que siempre recordarán.

Mi opinión:

¡Hola a tod@s!

Siento estar un poco desaparecida del blog, pero como muchos sabéis, me he metido en el proyecto NanoWrimo 2016... lo que me lleva a decir que estoy inmersa en la creación de mi quinta novela *-*

Evidentemente eso me quita un poquito de tiempo de leer, pero espero que el parón no sea demasiado largo... porque tengo una infinidad de libros por leer.

Pero bueno, centrémonos que nos vamos por las ramas. 

Hoy estoy aquí para hablaros de la primera novela de María Martínez Ovejero, quien, muy amablemente me envió un ejemplar para su reseña. Lo cierto es que cuando leí la sinopsis creí que la historia se centraría en una historia de amor veraniega, pero pronto descubrí que entre las páginas de la novela había mucho más.

La historia comienza con Alejandro, un joven madrileño que ha huido a tierras gallegas para desintoxicarse de una relación y de un modo de vida con el que no está satisfecho: su carrera no le gusta, apenas tiene unas metas que cumplir y Rebeca... bueno, ella siempre le manipula a su antojo. Así que un buen día avisa a sus tíos, hace las maletas y se marcha con la intención de poner en orden todos sus pensamientos.
Pero, ¿qué ocurre cuando en su vida se cruza una casa misteriosa y una chica más misteriosa aún? Lo que prometía ser un verano tranquilo se transforma gracias a Lara, una muchacha extraña, fascinante, que está vinculada por lazos familiares a la casa que tantas pasiones despierta en Alejandro.
Y aunque este es reticente a empezar una nueva relación (sea del tipo que sea) se verá arrastrado por Lara hacia la casa de Águeda, donde descubrirán, por azares del destino, un misterio oculto que engloba a parte del pueblo... y a ellos mismos.
Acompañados por Andrés, el hermanastro de Lara, se embarcarán en una aventura veraniega llena de amistad, del intenso amor que surge en los momentos más inesperados... y sobre todo, del resurgir de los sueños.

<<Sostuvo entre las manos de nuevo el viejo ejemplar de la novela prestada y no pudo evitar imaginarlo entre las finas y delicadas manos de Lara. ¿Quién iba a decirle que años después sería capaz casi de recitarlo de memoria?

Se tendió en la cama y a su mente vinieron las imágenes de ella, con la ropa mojada ciñéndosela al cuerpo>>

Poco más puedo decir de la trama, porque si lo hiciera desvelaría muchos puntos claves que te animan a seguir leyendo, y como quiero que leáis la novela, no seguiré por esos derroteros.
Sí aprovecharé para decir que yo terminé el libro en un suspiro, pues la narrativa de María acompaña perfectamente a cada situación: buenas descripciones, un ritmo suave y constante, que aumenta cuando la situación lo requiere y desciende cuando tenemos el corazón en la garganta (y es algo que os va a pasar, creedme).
Sin embargo, creo que lo más destacable de la novela (aparte del misterio que, aunque es sencillo, está bien hilado) son sus personajes... especialmente Lara. Para mí ha sido la piedra angular de esta historia, no solo porque todo gire a su alrededor, sino porque de verdad me ha conmovido. Existen pocos personajes con semejante dulzura y serenidad, sobre todo cuando conocéis ciertos detalles que la afectan directamente.
Alejandro también me gustó bastante, aunque no sé si fue por el momento personal en el que yo vivía o, simplemente, por la forma en que María describe los sentimientos de él hacia Lara. Sea como sea, disfruté mucho de la novela.

Quizá, como punto negativo, sí que reconozco que me hubiera gustado ver un poco más de la relación de Lara y Alejandro, y no centrarla tanto en el trío de amigos, aunque entiendo también por qué lo hizo.
En cuanto a aspectos más formales del texto... apenas vi errores (salvo el tema de los guiones largos y de dicción, que no están del todo correctos)  aunque sí que es cierto que en la primera versión que me mandó había un abuso de los puntos suspensivos (lo que hacía que todo pareciera demasiado lánguido y pesado) pero esos errores actualmente están solucionados, así que podréis disfrutar de la novela con tranquilidad.

Muy recomendable.

Escena favorita:

Sin duda, el momento en el que Alejandro ve a Lara en el ático de casa de tía Águeda. La escena está tan bien descrita que yo misma la reviví. Una preciosidad.

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