martes, 13 de diciembre de 2016

Cine: Vaiana

Vaiana


Hace 2000 años, en la isla Motunui ubicada en las islas del sur del Pacífico, Moana, una joven de 16 años de edad, hija única de un importante jefe de un largo linaje de navegantes, se sumergirá en una aventura épica a través del océano. La curiosa y aventurera Moana se unirá al semidiós Maui, e iniciará un viaje a través del océano con el fin de encontrar una isla legendaria y así salvar a su pueblo. Durante su emocionante aventura, los protagonistas se enfrentarán a criaturas marinas propias del antiguo folclore y descubrirán submundos impresionantes.

Mi opinión:

¡¡Sí!! ¡Disney lo ha vuelto a hacer!
Con estas palabras ya os podéis hacer una idea de lo muchísimo que me ha gustado este nuevo largometraje de Disney. Ya sabéis que soy muy fan de sus películas así que siempre que sacan una nueva (y me ponen los dientes largos) voy al cine con las expectativas muy altas.
Evidentemente, con Vaiana también fue así... ¡y las superaron con nota!

La historia de Vaiana es muy diferente a otros films de la compañía, aunque siguen la línea de las últimas películas (como Brave o Frozen). Ya no vemos a la típica princesa que busca el marido perfecto o el amor de su vida, sino que nos encontramos con una luchadora nata que ama el mar... y a su gente. 
La historia empieza mucho antes del nacimiento de Vaiana, cuando Maui, un semidiós que ansía el cariño de los humanos, roba el corazón de la isla Madre, que posee el poder de la creación. Su intención es dársela a los humanos, pero en medio de su viaje le atacará un demonio y lo desterrará a una isla de la que no podrá moverse. ¿Y el corazón? Se perderá en el océano. 
A primera vista la leyenda no parece tener ninguna importancia, pero con el paso del tiempo la desaparición de la isla Madre tendrá consecuencias... ya que una oscuridad destructora irá arrasando isla por isla... hasta llegar a Motunui, hogar de Vaiana. Será entonces cuando el espíritu del mar escogerá a Vaiana como emisaria... y le dará una misión que cambiará toda su vida: debe encontrar el corazón y hacer que Maui lo devuelva.

En líneas generales esta es la trama de la película: una aventura por mar, llena de la mitología propia del Pacífico, algo a lo que no estamos acostumbrados. Sin embargo, gracias al film (que está muy bien ambientado) descubriremos no sólo criaturas marinas y monstruos típicos del folclore, sino también las leyendas que rigen esas islas y sus costumbres (el detalle de los tatuajes, por ejemplo, me encantó).

Como siempre, Disney ensalza los valores del amor familiar, la amistad y el valor, que en esta película tiene un gran peso argumental (especialmente en cuanto a los orígenes se refiere). Esto, sumado a la preciosa fotografía de la película, los efectos especiales (que cada día se trabajan más) y a una perfecta bso hacen que Vaiana se coloque como una de las mejores películas de Disney hasta la fecha. 

En mi opinión, el punto más positivo de la película es la propia protagonista y su relación con el mundo... y, sobre todo, el hecho de que no haya una historia de amor en toda la trama. (Y las canciones, claro, de las que me declaro muy fan).
Sin embargo, no solo hay que hablar positivamente de ella, ya que Maui también es un personaje muy bien caracterizado. Su necesidad de agradar, de ser un héroe para el mundo, es un handicap a la hora de tomar decisiones, pero a medida que la película transcurre descubriremos sus verdaderos sentimientos hacia todo lo que lo rodea... lo que hará que le apreciemos aún más.

En definitiva, Vaiana se ha convertido en poco tiempo en una referencia, ya no solo para los niños, sino también para los que disfrutamos de una buena película.
Muy, muy recomendable.



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